12 enero, 2012

40.3 en el termómetro

Escribo desde las entrañas de la capital del frío (al menos en estos días), desde la esquina lúgubre de una cafetería. Siento cómo pasan las horas y siguen dándome recuerdos para nadie y aun así, sigo hablando con ellas.

Me dio por escribir porque gritar se queda muy corto y ahora me mofo del que dijo que no hace daño el que quiere sino el que puede... ingratos! No deberíais creeros superiores cuando vuestro ego no os deja ver más allá del agujero donde habitáis.

Hoy vine a molestar, como siempre, pero esta vez de manera más explícita. Como dijo Charly Efe: "Llama a un traductor para ver si pillas mi película". Pues eso, que el que quiera entender que tienda. Si, he dicho tienda porque va a tener que vender mucho hasta hacerse con el dinero suficiente para comprar algo de dignidad. Espero sentado, tumbado y fumando hasta morir de cáncer.

Sólo los buenos permanecen, el resto actúan como el destello de la noche... efímeros! Sólo permanecen aquellos que saben lo que se hace, aquellos que nacieron con el destino cruzado y saben lo que se hacen. Ange, la amistad entre hombres y mujeres existe, eso es una de las 2 o 3 cosas que tengo claro, y gracias a ti puedo corroborarlo. Esta te la debía.

El oráculo dijo: No busquéis fuera lo que no hay en vuestro interior. Insuperable.

La fiebre de Enero guía los pasos del escribano. 40.3 en el termómetro.

Paz y Amor peña!